Alejandro Romero
Lo que más me temía se hizo realidad, y por desgracia en noviembre nuevamente se paralizó el crecimiento del empleo en Sonora.
De acuerdo con datos del número de trabajadores registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en noviembre sólo se crearon 55 nuevas fuentes de trabajo en el Estado. En otras palabras el empleo se estancó.
En contraste, prácticamente todos los estados fronterizos registraron importantes saldos favorables durante ese mismo mes, como fue el caso de Nuevo León donde se crearon más de 6 mil 300 nuevas plazas.
Incluso a nivel nacional se logró el mayor crecimiento del empleo desde el inicio de la crisis a finales del 2008.
Según cifras del IMSS, en todo el País durante noviembre se generaron más de 106 mil nuevos empleos, notablemente más que los 79 mil de octubre y los 61 mil de septiembre.
Lo peor es que diciembre es un mes históricamente negativo para el empleo en Sonora, ya que siempre se presentan saldos en contra, debido a los empleos que se dan de baja en el sector comercio, tras el fin de las ventas decembrinas.
Por esto, desde ahora ya se puede anticipar con un 99% de confianza, que diciembre será un mes de pérdida de plazas para el Estado, con lo que ya se sumarán dos meses consecutivos donde el empleo o no avanza o retrocede.
Es importante recordar que al tercer trimestre de este año, el desempleo alcanzó niveles récord en Sonora con un tasa de 6.9% y un total de 71 mil personas desocupadas, el nivel absoluto más alto que se ha presentado en la historia de la entidad.
Por lo tanto, es fácil prever que el desempleo continuará a la alza y seguirá implantando nuevos récords, lo que desde luego no es nada favorable para la entidad y podría traer como consecuencia un mayor estancamiento y serios problemas sociales como una mayor inseguridad y pobreza, entre otros males.
El estancamiento del empleo en Sonora durante noviembre, es una muy mala señal de alerta que nos debe preocupar, pero sobre todo ocupar, porque mientras todos los estados fronterizos e incluso el País presentan señales claras de recuperación, en nuestro estado la reactivación ya comienza a extinguirse más pronto de lo esperado.
Y digo más pronto de lo esperado, porque en 2010 esto era previsible, ya que entrarán en operación los aumentos al IVA, ISR y los impuestos especiales, lo que terminará por estrangular más a la economía y provocará mayor inflación, con todos los efectos negativos que esto acarreará.
Por lo tanto, es previsible que a nivel nacional también se vea disminuida la recuperación, pero en los primeros meses del 2010. Entonces si nosotros ya presentamos desde ahorita problemas para recuperarnos ¿qué será en 2010 cuando la situación empeore? No quiero ni imaginarlo.
Y la realidad es que nadie piensa en una recuperación milagrosa e inesperada de Estados Unidos, por lo que si queremos revertir esta situación, los propios sonorenses somos los que tenemos que tomar las medidas pertinentes.
De lo contrario, el 2010 podría ser especialmente negativo para el Estado, incluso con una generación de empleos casi nula o muy incipiente, lo que haría elevarse de manera exorbitante el desempleo.
Ojalá esto quedara claro en especial para el equipo económico del gobernador Guillermo Padrés, integrado por el secretario de Economía, Moisés Gómez Reyna, el secretario de Infraestructura, José Inés Palafox Núñez, y el secretario de Hacienda, Alejandro López Caballero.
Mala señal
Lamentablemente, la noticia es que justamente las autoridades estatales no están concientes de la gravedad del problema, y es que en vez de elevar a niveles históricos la inversión en infraestructura, para el 2010 se plantea una reducción del 32%, esto de acuerdo a la Propuesta de Presupuesto Estatal para el próximo año enviada por el Gobierno del Estado al Congreso local.
Sí, aunque usted no lo crea, a pesar de todas las advertencias sobre que debe apoyarse la recuperación y que es importante invertir en más obras para evitar que volvamos a recaer en la recesión, el Gobierno estatal consideró antes que es más importante elevar los pagos de sueldos y salarios, o subir los gastos en bienes inmuebles o materiales y suministros.
Se recortó en un 32% el gasto en infraestructura, pero en cambio el presupuesto de la Secretaría de Gobierno subió en más de 33% para el próximo año, y al Supremo Tribunal se le asignó también un 17% más.
Es importante recordar que la inversión en infraestructura es el instrumento más directo y más efectivo que tiene el Gobierno estatal para incidir en la actividad económica, ya que es un rubro que puede generar un efecto multiplicador benéfico para varios sectores.
Por eso, esta reducción es sumamente grave, porque con esta asignación presupuestal queda muy claro que en el Gobierno del Estado no hay conciencia de la gravedad de la crisis y de lo débil que es y será la recuperación en 2010, por lo que no se tomaron, ni se están tomando, ni se tomarán medidas encaminadas a reducir el desempleo y elevar el crecimiento en 2010.
De aprobarse así el presupuesto y si no se toman medidas adicionales para apuntalar la recuperación del empleo en el Estado, me temo que estaremos condenados a un serio estancamiento económico en 2010. Esto sería terrible.
Alejandro Romero.
Economista y Jefe de Redacción de Informativo Entre Todos, con más de 12 años de experiencia en el periodismo económico y financiero.
Comentarios: elbbone@hotmail.com y alejandroromero@entretodos.com.mx
Lo que más me temía se hizo realidad, y por desgracia en noviembre nuevamente se paralizó el crecimiento del empleo en Sonora.
De acuerdo con datos del número de trabajadores registrados ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en noviembre sólo se crearon 55 nuevas fuentes de trabajo en el Estado. En otras palabras el empleo se estancó.
En contraste, prácticamente todos los estados fronterizos registraron importantes saldos favorables durante ese mismo mes, como fue el caso de Nuevo León donde se crearon más de 6 mil 300 nuevas plazas.
Incluso a nivel nacional se logró el mayor crecimiento del empleo desde el inicio de la crisis a finales del 2008.
Según cifras del IMSS, en todo el País durante noviembre se generaron más de 106 mil nuevos empleos, notablemente más que los 79 mil de octubre y los 61 mil de septiembre.
Lo peor es que diciembre es un mes históricamente negativo para el empleo en Sonora, ya que siempre se presentan saldos en contra, debido a los empleos que se dan de baja en el sector comercio, tras el fin de las ventas decembrinas.
Por esto, desde ahora ya se puede anticipar con un 99% de confianza, que diciembre será un mes de pérdida de plazas para el Estado, con lo que ya se sumarán dos meses consecutivos donde el empleo o no avanza o retrocede.
Es importante recordar que al tercer trimestre de este año, el desempleo alcanzó niveles récord en Sonora con un tasa de 6.9% y un total de 71 mil personas desocupadas, el nivel absoluto más alto que se ha presentado en la historia de la entidad.
Por lo tanto, es fácil prever que el desempleo continuará a la alza y seguirá implantando nuevos récords, lo que desde luego no es nada favorable para la entidad y podría traer como consecuencia un mayor estancamiento y serios problemas sociales como una mayor inseguridad y pobreza, entre otros males.
El estancamiento del empleo en Sonora durante noviembre, es una muy mala señal de alerta que nos debe preocupar, pero sobre todo ocupar, porque mientras todos los estados fronterizos e incluso el País presentan señales claras de recuperación, en nuestro estado la reactivación ya comienza a extinguirse más pronto de lo esperado.
Y digo más pronto de lo esperado, porque en 2010 esto era previsible, ya que entrarán en operación los aumentos al IVA, ISR y los impuestos especiales, lo que terminará por estrangular más a la economía y provocará mayor inflación, con todos los efectos negativos que esto acarreará.
Por lo tanto, es previsible que a nivel nacional también se vea disminuida la recuperación, pero en los primeros meses del 2010. Entonces si nosotros ya presentamos desde ahorita problemas para recuperarnos ¿qué será en 2010 cuando la situación empeore? No quiero ni imaginarlo.
Y la realidad es que nadie piensa en una recuperación milagrosa e inesperada de Estados Unidos, por lo que si queremos revertir esta situación, los propios sonorenses somos los que tenemos que tomar las medidas pertinentes.
De lo contrario, el 2010 podría ser especialmente negativo para el Estado, incluso con una generación de empleos casi nula o muy incipiente, lo que haría elevarse de manera exorbitante el desempleo.
Ojalá esto quedara claro en especial para el equipo económico del gobernador Guillermo Padrés, integrado por el secretario de Economía, Moisés Gómez Reyna, el secretario de Infraestructura, José Inés Palafox Núñez, y el secretario de Hacienda, Alejandro López Caballero.
Mala señal
Lamentablemente, la noticia es que justamente las autoridades estatales no están concientes de la gravedad del problema, y es que en vez de elevar a niveles históricos la inversión en infraestructura, para el 2010 se plantea una reducción del 32%, esto de acuerdo a la Propuesta de Presupuesto Estatal para el próximo año enviada por el Gobierno del Estado al Congreso local.
Sí, aunque usted no lo crea, a pesar de todas las advertencias sobre que debe apoyarse la recuperación y que es importante invertir en más obras para evitar que volvamos a recaer en la recesión, el Gobierno estatal consideró antes que es más importante elevar los pagos de sueldos y salarios, o subir los gastos en bienes inmuebles o materiales y suministros.
Se recortó en un 32% el gasto en infraestructura, pero en cambio el presupuesto de la Secretaría de Gobierno subió en más de 33% para el próximo año, y al Supremo Tribunal se le asignó también un 17% más.
Es importante recordar que la inversión en infraestructura es el instrumento más directo y más efectivo que tiene el Gobierno estatal para incidir en la actividad económica, ya que es un rubro que puede generar un efecto multiplicador benéfico para varios sectores.
Por eso, esta reducción es sumamente grave, porque con esta asignación presupuestal queda muy claro que en el Gobierno del Estado no hay conciencia de la gravedad de la crisis y de lo débil que es y será la recuperación en 2010, por lo que no se tomaron, ni se están tomando, ni se tomarán medidas encaminadas a reducir el desempleo y elevar el crecimiento en 2010.
De aprobarse así el presupuesto y si no se toman medidas adicionales para apuntalar la recuperación del empleo en el Estado, me temo que estaremos condenados a un serio estancamiento económico en 2010. Esto sería terrible.
Alejandro Romero.
Economista y Jefe de Redacción de Informativo Entre Todos, con más de 12 años de experiencia en el periodismo económico y financiero.
Comentarios: elbbone@hotmail.com y alejandroromero@entretodos.com.mx
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