La Sombra Telemax 31 de agosto del 2015

Comentario económico de Alejandro Romero 1 de julio del 2015

miércoles, 12 de agosto de 2009

Hermosillo ¿la ciudad más cara de México?


Alejandro Romero

Es para dar coraje… Hermosillo es una de las ciudades donde más suben los alimentos en todo México.

Nada más para que se dé una idea, en lo que va del año aquí en la capital del Estado han subido el doble de lo que han aumentado en el Distrito Federal (DF).

Y que no nos vengan con el cuento de que no nos podemos comparar con el DF, porque allá es el centro industrial del País. Sí lo podemos hacer, y es indignante que allá todo se mantenga estable y aquí suba y suba.

También si nos comparamos con Tijuana, que está mucho más lejos que nosotros del Centro del País, y que además este 2009 ha sufrido el impacto de la devaluación del peso, allá también han aumentado menos los precios de los alimentos en comparación a nosotros.

De acuerdo con cifras del Banco de México, de enero a julio de este año, los precios de los alimentos en Hermosillo han aumentado un 4% en promedio, prácticamente lo mismo que todo el aumento anual autorizado a los salarios mínimos.

En cambio en el DF los alimentos sólo subieron 2%, mientras que en Tijuana el incremento de sus precios fue de sólo 3%.

Vámonos a ejemplos más específicos, para que vea en qué se traduce que los precios de los alimentos en Hermosillo, suban al doble en comparación con el DF.

De acuerdo con datos de Banxico, en los primeros siete meses del 2009, el precio del pescado en Hermosillo aumentó un 30%, mientas que en Tijuana sólo subió 5%. Esto a pesar de que Sonora es uno de los principales productores pesqueros y acuícolas de México.

Otro ejemplo: el maíz en Hermosillo ha subido un 19% en lo que va del año, en Tijuana sólo 7% y en el DF sólo 10%. El chorizo 12% aquí, 6% en el DF y 5% en Tijuana.

Otro aumento sin ton ni son: La cerveza en Hermosillo se ha incrementado en un 11%, contra el 5% que se ha presentado en Tijuana y el 6% en el DF. Esto pese a que Sonora cuenta con plantas productoras de cerveza que abastecen al Noroeste del País.

La tortilla de maíz, tan importante en la alimentación de cualquier mexicano, incluso ya de muchos sonorenses, aquí ha subido 10% y en el DF sólo 3%.

Con el pan de caja y las tortillas de harina se repite la historia; tenemos una importante producción de trigo y tenemos plantas procesadoras de estos alimentos, y aún así los precios de estos productos en Hermosillo suben al doble que en otros rincones de México.

No se vale
Insisto. Alguien, ya sea Profeco, Sagarpa o Sagarhpita, Economía estatal o federal o todos en conjunto, deben retomar este asunto porque se está impactando seriamente a la economía familiar de los sonorenses.

Como lo comentamos la semana pasada, esto está afectando duramente a un tercio de los sonorenses que tienen ingresos menores a los 3 mil pesos mensuales y con mayor razón está impactando a un 10% de la población, que gana menos de mil 500 pesos al mes.

En la clase media y media baja que gana entre 3 mil y 8 mil pesos al mes, y que representa a un 50% de los sonorenses, desde luego que esto también tiene serios efectos, ya que aunque sigue en posibilidades de adquirir la despensa básica, el hecho de destinar mayor parte de su ingreso al gasto del súper, limita la posibilidad de comprar otros bienes y servicios que le dan agilidad y vida al resto de la economía.

Es decir, estos aumentos desmedidos de los precios, además de enviar a la pobreza a más sonorenses de bajos ingresos de la mano de la crisis, también podrían convertirse en un factor que estanque el crecimiento de la economía estatal en su conjunto, de ahí que es importante que se tomen cartas en el asunto.

Esta alza “inusual” de precios en Hermosillo y en Sonora sólo puede ser producto de tres cosas: Problemas de abasto en ciertos productos, problemas de distribución y por especulación.

Si el problema es de abasto o de distribución, el Gobierno y los empresarios deben preocuparse por conseguir nuevos mercados para la adquisición de los alimentos.

También es necesario analizar qué tanto influye el aumento del diesel, insumos agropecuarios y los costos del flete. Y de ser necesario, es importante establecer medidas que propicien una mayor estabilidad de precios en los costos de los alimentos que consumen los sonorenses.

No es a través de un control de precio cómo se lograría detener esta escalada, ya que esto en vez de ayudar alienta la especulación y el acaparamiento, además de que crea un “jugoso” mercado negro evasor de impuestos.

El camino es propiciar que los costos de la producción y distribución de los alimentos se mantengan estables y no haya alzas que se carguen posteriormente a cuenta de los consumidores. También buscar que Sonora tenga un abanico de opciones de mercados para adquirirlos.

Pero a como están los aumentos, la realidad es que muchos no parecen estar justificados por ninguna razón y todo indica que hay especulación.

De ser así, sería importante contar con una regulación más estricta en la materia, que castigue y frene de golpe a quienes intenten lucrar indebidamente con la alimentación de los sonorenses, porque esto de verdad no se vale y puede acarrear muchos problemas sociales a futuro.

Alejandro Romero.
Economista y Jefe de Redacción de Informativo Entre Todos, con más de 12 años de experiencia en el periodismo financiero y de negocios.
Comentarios:
elbbone@hotmail.com y alejandroromero@entretodos.com.mx

No hay comentarios:

Publicar un comentario